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Ameca es la primera población conformante de la Ruta del Peregrino, un largo trayecto que recorren cientos de personas a pie, con el fin de dar gracias a Dios por algún favor recibido.

Una historia muy popular con la que resalta Ameca es aquella en la que se dice que Porfirio Diaz acudió de visita, sin embargo al llegar a la estación del tren, una mujer no supo quien era y le pidió que le ayudara a limpiar. Hoy en día este camino puede ser recorrido a pie.

Otro lugar que podrá visitar es la Presidencia Municipal, pues desde su balcón se obtiene una muy buena vista del centro y es abierto al público; además por las noches es común ver a la gente reunida mientras un grupo de jóvenes y ancianos representan diversas leyendas.

En la mañana puede acudir al Templo de Santiago Apóstol, en la que hace algún tiempo, durante los trabajos de remodelación se encontraron algunos restos humanos bajo el piso. Además aquí se venera también a Santo Domingo, por lo que 25 de julio se realizan danzas en su honor.

Y claro no olvide la principal razón de esta ruta del peregrino, la Virgen de Talpa, a ella se le adjudican muchos milagros, comenzando por el de su descubrimiento, pues después de muchos años de ser venerada, comenzó a deteriorarse, por lo que poco después de ser remplazada en su altar por una imagen más grande, el entonces Párroco del lugar ordeno se le sepultara, pero al momento de tomarla para colocar en aquel hoyo cavado para ella, una luz resplandeció alrededor suyo, momentos después se le vio totalmente restaurada; a partir de ese día se han ido acumulando los milagros que realiza constantemente, así, se le venera fielmente.

Durante la Ruta del Peregrino se encontrará con diversos monumentos en diferentes estaciones del recorrido, uno de ellos se encuentra en Ameca, se trata del Monumento a la Gratitud, una capilla abierta formada por cuatro muros separados a tal distancia que si levanta la mirada notará que la sombra de los cuatro forman en conjunto una cruz; a su costado se encuentra el muro de los milagros, aquí los fieles dejan plasmados sus motivos de gratitud.